No sentiré vacía mi traviesa, la que columpiaba soledad, porque hoy...
Tú.. meces mis emociones, con tan sólo una mirada.
No vacilaré con aires de retiro, porque hoy...
Tú.. acaricias mi Alma.
No meceré melancolías, porque hoy...
Tú.. incitas al mundo a tomar rumbo.
No oscilaré entre forjar o deber, porque hoy...
Tú.. acunas razón en mi corazón.
Porque hoy, Tú.. meces esencias acariciando impulsos de ánimo.
¡¡Ven..! ¡Sientate Amor mío!!
Porque hoy Tú.. impulsas el columpio de mi Alegría.
(enero de 2011)